miércoles, 30 de octubre de 2013

Derechos humanos durante la presidencia de Raúl Alfonsín (1983-1989)



   El gobierno que siguió a la dictadura militar del 76 fue encabezado por Raúl Alfonsín, elegido democráticamente.
   Tuvo que reparar el daño que causó este gobierno de facto, principalmente tuvo políticas de restauración de los derechos humanos, por ejemplo:
A la identidad y a la defensa, porque lo primero que hizo cuando asumió la presidencia fue crear una comisión que reciba denuncias y pruebas sobre desaparición de personas (CONADEP) y encargarse de encontrarlas, ya sea vivas o muertas.
A la libertad personal, a la libertad de expresión, a la protección de la libertad de conciencia y religión y a reunirse libremente y asociarse, ya que, a diferencia de la época de la dictadura, en este gobierno no te discriminaban, violentaban, secuestraban o mataban cuando exteriorizabas tus ideologías.
Al desarrollo humano, económico y social sostenible, porque en su gobierno comenzó a emerger la economía del país, aunque haya terminado fallando, lo cual era entendible ya que recibió un país en quiebra total, al cual el extranjero no le quería prestar dinero porque no lo consideraban una “buena inversión”.
A vivir en paz, ya que, aunque dolidos por las muertes y desapariciones, las personas obviamente notaban un ambiente mucho mas tranquilo, comparado con salir a la calle y ver violencia física y verbal por todos lados, como en la dictadura. Y podían sentir cierta contención por parte del gobierno, que intentó curar las heridas que la dictadura dejó.
  A un juicio justo en un plazo razonable ante un tribunal objetivo, independiente e imparcial y a la doble instancia judicial, porque se dejaron de lado los privilegios que los militares tuvieron durante el gobierno de facto y se les realizo un juicio objetivo que los condenara como merecían.
   Los juicios no llegaron a su fin, continuaron habiendo desaparecidos y la economía no llegó a desarrollarse en gran medida, pero cabe destacar que las medidas, aunque no llevaron al país a salir completamente de la crisis, fueron muy importantes y un gran avance para la mejora del país.

Derechos humanos en la última dictadura militar argentina (1976-1983)


   En el año 1976 un gobierno de facto impuso una dictadura cívico-militar que se autodenominó “proceso de reorganización nacional”, derrocando el gobierno de María Estela Martínez (viuda de Perón). En su lugar, tomó el poder una junta militar encabezada por comandantes de las tres Fuerzas Armadas. Se la consideró la dictadura más sangrienta de la Argentina, se caracterizó justamente por la constante violación de los derechos humanos. Los derechos individuales se ven totalmente afectados por el estado
Se violaron los derechos:
A la vida, debido a la muerte de miles de personas a manos del estado.
A la identidad, ya que robaban constantemente bebés recién nacidos para dárselos a familias privilegiadas económicamente, sin brindarles información sobre su verdadero origen.
A la igualdad ante la ley, porque durante este golpe de estado se declaró en la constitución que los criminales que estaban al mando del gobierno eran impunes, no se les podía realizar juicios, o sea, tenían privilegios ante la justicia.
A la integridad personal, debido a la violencia injustificada que ejercían físicamente a cualquier persona, lo que les dejó una consecuencia psíquica seguramente debido a la tortura tan cruel que practicaban.
A la libertad personal y de expresión y a no ser discriminados, porque a las personas que tenían ideologías políticas distintas a las de ellos los secuestraban, ejercían violencia sobre ellos, los mataban… Esto también pasaba con las clases sociales no privilegiadas.
A peticionar ante autoridades y a reunirse libremente y asociarse, ya que no podían realizar movilizaciones porque no eran escuchados, eran reprimidos y violentados.
A la propiedad privada, porque muchas veces secuestraban o mataban a familias y se apropiaban de sus hogares y pertenencias para beneficio propio o como centros de tortura.
A vivir en paz, ya que vivían en el miedo, bajo constante amenaza y temor a que les pueda pasar algo, no solo fuera de sus casas, porque los represores podían entrar a ellas a la fuerza en cualquier momento.
Al desarrollo humano, económico y social sustentable, porque ya no existía la industria nacional, el unico ingreso de dinero era mediante negocios que realizaba la oligarquía con el extranjero y solo beneficiaba a su sector social, al no trabajar el resto de la población, era imposible desarrollarse económicamente, o socialmente, no hubo ningún avance, para el país fue como estar estancado 7 años. Y en cuanto al desarrollo humano fue retroceder, imponer poder mediante violencia y represión es algo que en realidad debería haber quedado muy atrás.